Os cuento lo que me paso a mi en Lapeza, yo estuve lavando en el rio casi toda la mañana. Llevaba una buena canastas de trapos y en una piedra, con un trozo de jabon de esos de sosa pues venga restregones. Volvi cansada a mi casa, pues me dijo mi madre que enseguida este: “ Maria hay que buscar los sacos y los que esten rotos, hay que coserlos, porque esta tarde viene la maquina a la era" .pues yo digo:" yo tengo sueño".pues dice:" despues duermes, pues hay que aprobechar que no se moje la parva, que sino se pudre".
Pues sabeis que hice, teniamos una zalea, que es un pellejo de una oveja, con toda su lana, pues la cogi. y me meti de bajo de la cama y me dormi. Mi madre buscandome por todos lados, por las vecinas y no me encontraba. Me llamaba, "donde estara esta, donde se ha metio, pues me decia Maria, gritaba mas, Maria .
Yo de sentia de llamarme muy lejos, pero casi no la oia, pues despues de coser los sacos que ya se ivan a la era, otra ves me llama y me dice: "donde se ha metio esta" y digo: "si estoy aqui", "eso no es verdad, pues te he buscado por todos sitios". Y yo tan feliz debajo de la cama durmiendo, lo que yo digo es que eramos felices con todo, durmiendo en el suelo o donde fuera, que buenos huesos teniamos, entoces no existia la astrosi. Eramos felices, solo se pensaba en comer,.
Despues nos fuimos a la era a abrir los sacos, ayudar a atarlos y a barrer la parvaera. Era bonito llenar los sacos con la cuartilla.
Yo era feliz en verano, no fartaba el pan, se cogia un tomate se partia por medio, se le echaba sal por encima y estaba de gueno, probarlo cuando tengais calor y ya vereis que rico y si es un tomate de Lapeza mejor.
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