Bien pues a mi el verano era lo que mas me gustaba, porque había abundancia de todo, es decir de hortalizas, de patatas, de pan de trigo, de garbanzos, la verdad que yo era feliz viendo tanta abundancia.
Recuerdo cuando se trillaba en las eras de Sebastián, en la eras de la Caral, en las de la loma, era una hermosura ver tanta parvas, pues havía que trillar y con unas horcas abrir los haces de trigo y los mulos con el trillo dando vueltas y vueltas hasta que se machacaba ,
Era cuando después con un escobón de retama se barría la parva para que todo quedará parejo, pues hacia mucha calor, entonces era cuando debajo de los haces havía un cántaro de agua fresquita para el trillador.
Pues yo recuerdo llevarle a mi padre el café o un gazpacho con papas fritas, la verdad que yo era muy feliz.
Bueno después cuando se había trillado, se hacia un monton muy grande en las eras. Era cuando había que coger numero para que vinieran a alentar, porque solo había una maquina. Esto era peligroso como por aquellos balates subía la maquina entre muchos hombres. Eran muy valientes y trabajadores los hombres de La Peza.
Bien pues lo que a mi me hacia iusión era el dia de la maquina en la era mejor por la noche, porque sino hacia una calor se derretían las palabras, pues era cuando ponía la maquina junto a la pila del trigo o la cebada y empezaban a echar palas y la maquina a echar trigo, y era cuando llenabas los sacos con una medida que se llamaba, la cuartilla, pues una fanega eran cuatro cuartillas
Pues se llenaban los sacos los recárgabas para que cogieran mas y entonces con unos cordones de soga machacada, era cuando atabas el saco y después lo cargabas en los mulos ,
Pues a mi me daba una alegría ver tanto saco, y decía ya tenemos pan para el año.
pero que pena, empezaban a venir gente a cobrar y la verdad, que se lo llevaba casi todo.
Pues mi padre que en gloria este, guardaba unos sacos para la simiente, que estos se sembraban para octubre, pero la verdad que a vecés si se tardaba en sembrarlo cuando iba, se encontraba el saco vacío, pues nosotros cada dia cuando salía de la escuela, cogíamos una farda de trigo y lo cambiábamos por pan.
Pues como he dicho a mi me gustaba el verano, porque había abundancia, pero cuando había que pagar me daba una pena de pensar empezar otra vez con la libreta de lo fiado.
Pero feliz, lo juro.
Esto lo recuerdo yo con alegría, cuando ibas a la hortaliza, cogías un melón y lo partías con una piedra. Lo comía a trozos, yo creo que todos los que tenéis mi edad lo habeis vivido. Eran unos tiempos de mucha miseria y de trabajo de sol a sol, pero estábamos mas contentos que unas pascuas, yo bailaba hasta con la escoba.