Oh llama de amor viva
que tiernamente hieres
de mi alma en el más profundo centro¡
pues ya no eres esquiva,
acaba ya, si quieres,
rompe la tela de este dulce encuentro
oh cauterio suave
oh regalada llaga
oh mano blanda
oh toque delicado
que a vida eterna sabe
y toda deuda paga,
matando, muerte en vida
la has trocado.
Oh lámparas de fuego,
en cuyos resplandores
las profundas cavernas del sentido,
que estaba oscuro y ciego,
con extraños primores
calor y luz dan
junto a su querido
cuán manso y amoroso
recuerdas en mi seno
donde secretamente
solo moras, y en tu aspirar
sabroso de bien y gloria
lleno cuán delicadamente
me enamoras
canciones que canta
el alma en la intima union
con Dios, su esposo amado
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