Os cuento, antes en Lapeza cuando, venian de otros pueblos a buscar novia y el forastero se echaba novia. Pues los chicos de Lapeza decian:
Bien yo tenia una prima que le salio un novio forastero, pues cuando se fue, le perdieron la bicicleta por no pagar la convida y se tuvo que volver andando.
“¿Habeis visto? tan bonica y se la van a llevar de Lapeza. Nos hemos quedado plantados . Pues bien ese, si quiere novia, tiene que pagarnos el pato”.
El pato era una buena convida a los mozuelos, que se juntaban unos pocos. Bien pues si el forastero se resitia a pagar el vino, le daban para que se comprara unas buenas zapatillas y saliera corriendo del pueblo.
Con esa convida el forastero se hacia amigo de los pezeños y asi podia venir todas las semanas a ver a la novia.
Con esa convida el forastero se hacia amigo de los pezeños y asi podia venir todas las semanas a ver a la novia.
Bien yo tenia una prima que le salio un novio forastero, pues cuando se fue, le perdieron la bicicleta por no pagar la convida y se tuvo que volver andando.
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