Os cuento, en Lapeza como en todos los sitios, no habia como ahora, que tenemos yogures de todos los sabores y de todos los colores, la verdad es que no habia ninguno, ni quesitos, nada de nada.
Solo cuando se hacia el arroz con leche para San Marcos y la Semana Santa, asi que solo pènsabamos que llegara para hacer el arroz con leche.
Era de pena, pero contentos, yo me acuerdo con que alegria nos poniamos junto a la fuente, pues parecia que estabamos trabajando en una mina. El arroz estaba mas seco que el ojo Pavilo, pero estaba gueno..
Como he dicho lo de la mina era porque como estaba el arroz en la fuente, pues cada uno por su lado, pues decía:" haber quien llega antes a descubrir al otro
La verdad es que era yo siempre, era yo la primera, pues tenia el gaznate de un pavo.
Bueno como he dicho yo ya me havia benido de Lapeza y los yogutes no exitian.
Pues sacaron una yogurtera que traia unos vasos pequeños y era como una fiambrera con un enchufe, pues se comprava un yogur y se le echaba a la leche y se enchufaba toda la noche. Pues al otro dia todos con los yogues, pero no creais que eran de colore sino blancos, hasta que despues le salio el colorete.
Asi que antes no habia tantas cosa como ahora, pues yo digo soy mas desgracia que el pupas que se cayo para atras y se rompio las narices, porque ahora que tenemos de todo y se puede comer todo lo que se quiere, pues como yo digo todo lo gueno engorda.
Pues imaginaros yo vivo enfrente de una pasteleria, pues por el balcon veo los pasteles y solo eso me engorda, solo mirarlos
1 comentario:
Gracias por hacerme recordar un detalle de mi infancia. Lo comparto contigo: Cuando eramos pequeñas mis dos hermanas y yo (de esto hace como 20 años), amábamos el arroz con leche. Durante las vacaciones, mi abuela nos preparaba "arroz con leche y canela" si nos portábamos bien y le ayudábamos a hacer las tareas de casa. Recuerdo con tanto amor el sabor de ese postre que para nosotras era el premio más esperado del día.
Un abrazo,
Peregrina.
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